Tarta de frutas secas

Tarta de frutas secas

En el siglo XIX los carnavales se festejaban en todas las ciudades de América Latina. Dicen los historiadores que durante la fiesta se olvidaban los refinamientos y las distancias entre las clases.

La fiesta comenzaba como regla con un cañonazo y partir de ese momento, todos se perseguían por las calles para arrojarse agua. Desde las terrazas de las casas, podía llover agua perfumada. intensidad de los festejos llegaba a tal nivel que en Buenos Aires, por ejemplo, en 1820 la policía pusiera coto a este género de juego, inventado para el escándalo más temible de todas las pasiones juntas.

En varias otras capitales hubo que pedir permiso para organizar bailes públicos y se estableció un horario para jugar con agua.

De la comida que se consumía durante el carnaval, la tarta de frutas secas era quizás la más famosa:

Ingredientes:


Masa:

• 250 gramos de harina
• 100 gramos de azúcar
• 170 gramos de manteca
• 1 huevo
• 50 g de agua fría

Relleno:

• 3 cucharadas de miel
• 200 gramos de azúcar
• 200 cc de crema de leche
• 50 gramos de almendras
• 50 gramos de Castañas
• 50 gramos de nueces
• 50 gramos de avellanas
• 50 gramos de maní
• 1 cucharada de naranja

Y procedemos:

1. Masa: Procesar la harina con el azúcar y la manteca hasta obtener un arenado. Agregar el huevo y el agua fría. Formar la masa y llevar a la heladera hasta que esté firme.
2. Estirar la masa y forrar una tartera. Precocinar diez minutos en el horno a 180 grados centígrados.
3. Relleno: En una cacerola colocar el azúcar y la miel, llevar al fuego y formar un caramelo claro. Agregar la crema caliente y mezclar cuidadosamente hasta que se integre (la crema se agrega caliente para facilitar la incorporación).
4. Retirar del fuego e incorporar las frutas secas y la ralladura de naranja, luego mezclar bien.
5. Verter el relleno sobre la masa.
6. Llevar nuevamente al horno a 180 grados por 15 minutos.
7. Retirar y dejar enfriar.

“Para mí, la cocina no es algo metódico, sino que tiene que ver con los sentimientos. Es algo espiritual y artístico” (Kisko García). Foto: Elena.